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Retrasos en la Emisión de Cédulas Profesionales: Un Desafío para UDC e IESM

Retrasos en la Emisión de Cédulas Profesionales: Un Desafío para UDC e IESM
  • Publicadoenero 4, 2025

En las últimas semanas, los egresados de las universidades UDC e IESM han enfrentado significativos retrasos en la emisión de sus cédulas profesionales, un documento crucial para poder ejercer su profesión en México. Estos retrasos han generado inquietud tanto entre los estudiantes como en los egresados, quienes temen que la situación afecte su futuro profesional.

A pesar de que ambas universidades cuentan con programas académicos avalados por los Reconocimientos de Validez Oficial de Estudios (RVOE), los retrasos en la entrega de las cédulas han generado incertidumbre. La Dirección General de Profesiones ha explicado que estos retrasos responden a un proceso de revisiones administrativas adicionales, que buscan garantizar la calidad de los títulos. Sin embargo, algunos expertos en derecho educativo consideran que podría haber razones detrás de este retraso, sugiriendo que se trata de una estrategia para dañar la reputación de estas universidades, especialmente en un sector de alta demanda como la medicina estética.

El proceso de obtención de la cédula es clave para que los egresados puedan comenzar a trabajar en su área. Sin embargo, la demora en su emisión está afectando la estabilidad laboral de los médicos y cirujanos estéticos que han cumplido con todos los requisitos para ejercer. Además, los estudiantes actuales temen que su futura obtención de cédula también se vea comprometida, lo que podría influir en su decisión de continuar en estas instituciones.

Si bien las autoridades aseguran que se trata de un proceso administrativo normal, los egresados siguen sin recibir su cédula, lo que ha aumentado la percepción de un trato desigual en comparación con otras universidades. Este retraso no solo afecta a los egresados, sino también a la reputación de las universidades involucradas, que han tenido que enfrentar comentarios negativos y desconfianza pública debido a estos inconvenientes.

Para garantizar que esta situación no se repita, es necesario que las autoridades educativas tomen medidas claras y transparentes que resuelvan los retrasos de manera efectiva. Solo así se podrá garantizar la calidad educativa y profesional de los egresados, sin que los intereses ajenos afecten el proceso. Es crucial que se ofrezca una solución que permita a los estudiantes y egresados de UDC e IESM ejercer su derecho a trabajar sin más obstáculos.

Patricio Mendoza.

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